No se trata de la vida idílica en el campo, sino de los conflictos de familia y de las oportunidades dejadas escapar. Es la mezcla de melancolía y de ironía finamente dibujada, la que hace tan especial la primera novela de Dörte Hansen.
La trama
Se desarrolla en el norte de Alemania en el Altes Land. En el punto central de la obra se encuentran dos mujeres. Vera, la más mayor, llega al final de la última Guerra Mundial con su madre como niña refugiada desde Prusia Oriental. Su padre está muerto, el hermano pequeño congelado en la huida. Se alojan en casa de una agricultora y es aquí donde la pequeña Vera crece y se hace adulta. Nunca se sentirá en su país, ni echará raíces, sólo se encontrará atrapada.
La otra mujer es Anne, la sobrina, una profesora de flauta que vive junto con su novio y su hijo común en el barrio de moda en Hamburgo, en Ottensen. No encuentra su lugar allí, ni se siente bien, pero allí permanece. Hasta que un día se ve expulsada del barrio. Por la amante de su novio, que simplemente toma a este hombre, que tampoco tiene nada en contra de ello y trata de arrebatar igualmente a su hijo.
La mujer joven huye al campo, a casa de su vieja tía. Dos personas sin patria, dos espíritus heridos que, sin haberlo planeado en absoluto, se van a curar una a la otra. O por lo menos, lo van a intentar.
La valoración
Esta novela apenas tiene trescientas páginas y cuando se llega a la última página, uno desearía poder leer otras trescientas páginas más. La novela habla sobre conflictos familiares, que tienen que ser sobrellevados, y que se arrastran durante generaciones. Habla también de dos mujeres fuertes, que desconocen su propia fortaleza.
Se trata de historias sobre la vida, que están llenas de tragedia y nostalgia, de ocasiones perdidas que podían haber transcurrido de forma totalmente diferente. La contraposición entre aquellas personas que viven en el campo porque no pueden hacer otra cosa y no conocen otra cosa y aquellas que llegan de la ciudad, porque quieren vivir tal como lo hace la gente del campo, han deseado siempre vivir en una casa típica de la zona y, en muchas ocasiones, se ponen en evidencia.
Todo ello narrado de forma muy entretenida, en un ambiente dominado por el silencio, con una mirada prudente en la vida interior de las personas.
La autora
Dörte Hansen tiene 51 años, es nacida en Husum. Viene del campo. Y vive en el campo (Altes Land). Siempre le ha molestado algo la gente que se hace una idea de la vida en el campo que no tiene nada que ver con la realidad (por ello también escribió el libro). Ha estudiado Filología, ahora es periodista. “Altes Land” es su primera novela. Ha sido bestseller durante muchos meses en Alemania y todo un éxito.